Los artistas se reunieron por primera vez en un set, donde la moda, el confort y la buena energía fueron los protagonistas. Ambos llevaban las zapatillas nuevas. paso deslizantesímbolo de un estilo moderno y versátil.
El dúo demostró que verse bien y sentirse bien pueden ir de la mano. Con looks frescos y funcionales, reflejaron cómo la moda puede adaptarse al ritmo activo y multifacético de hoy.
por primera vez, María Pía Copello y Juan Carlos Rey de Castro coincidieron en el mismo set, en una sesión fotográfica que reveló no solo su estilo, sino también una conexión natural frente a las cámaras. Risas, miradas expertas y buena energía marcaron un encuentro donde la moda y la comodidad fueron las auténticas protagonistas.
Ambos participaron como embajadores de Skechers y compartieron una jornada donde la espontaneidad fue clave. Durante la sesión lucieron las nuevas zapatillas Glide-Step, un modelo que combina un diseño moderno, ligereza y una pisada más suave, ideal para su estilo de vida activo y polifacético.
“Hoy en día, la comodidad se ha convertido en una prioridad. Me encanta sentirme bien y al mismo tiempo lucir bien”, afirma María Pía, quien entre sesiones, familia y eventos siempre busca prendas versátiles que se adapten a su día.
Juan Carlos, por su parte, destacó el equilibrio entre lo funcional y lo elegante: «El estilo también es sentirse cómodo. Creo que la moda actual es así: lucir bien sin perder naturalidad».
Durante la producción, los artistas mostraron cinco looks que reinterpretan la tendencia athleisure, esa mezcla perfecta entre lo deportivo y lo sofisticado. María Pía apostó por combinaciones femeninas con faldas y vestidos de vuelo, mientras que Juan Carlos optó por outfits urbanos con chaquetas, joggers y polos de algodón.
Entre cambios de ropa y linternas, la conversación fluyó entre risas y anécdotas. Hablaron de su pasión por las zapatillas, del equilibrio entre trabajo y bienestar y de cómo la moda puede expresar quiénes somos sin decir una palabra.
El resultado fue una sesión fresca, auténtica y con estilo, donde ambos demostraron que la elegancia no está reñida con la comodidad. Como acordaron al final del día:
«Verse bien es importante, pero sentirse bien lo cambia todo».