El princesa catalina afirma estar preocupado por los efectos nocivos de teléfonos inteligentes en las relaciones humanas, especialmente en las más jóvenes, según un texto publicado el jueves en el sitio web de su fundación infantil.
Catalina y Guillermo, heredero al trono, tienen tres hijos (Jorge, 12 años, Carlota, 10 y Luis, 7) y ninguno tiene celular.
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“Somos muy estrictos al respecto”, confesó la semana pasada el Príncipe de Gales en una entrevista.
La princesa visitó el jueves la organización benéfica Home-Start en Oxford, sureste de Inglaterra, que se especializa en ayudar a padres con niños pequeños, donde habló con voluntarios y familias sobre la importancia de los lazos familiares.
En el sitio de la Fundación Real Centro de la Primera Infancia, la organización que Catalina creó en 2021 y que se ocupa de la primera infancia, la princesa firma un texto en colaboración con el psiquiatra estadounidense Robert Waldinger, director de un estudio sobre el desarrollo de adultos llamado «El estudio de Harvard sobre el desarrollo de adultos», para señalar los peligros de las «interferencias» tecnológicas.
“Si bien los dispositivos digitales prometen mantenernos conectados entre nosotros, a menudo hacen lo contrario”, escriben la princesa Catalina y Robert Waldinger.
“Nuestros teléfonos móviles, tabletas y ordenadores se han convertido en fuentes de distracción permanente, fragmentando nuestra atención e impidiéndonos dar a los demás la consideración que exigen las relaciones humanas”, añaden.
La Princesa de Gales, de 43 años, visitó Home-Start Oxford, que ofrece apoyo gratuito a familias con al menos un niño menor de 5 años que están pasando por momentos difíciles, para hablar de la importancia del apego en el desarrollo emocional del niño.
«Consultamos nuestros teléfonos durante las conversaciones, navegamos por las redes sociales en las cenas familiares o contestamos correos electrónicos mientras jugamos con nuestros hijos. No sólo nos distraemos, sino que les estamos retirando la forma más básica de amor que requiere la conexión humana», dice la princesa en el texto escrito en colaboración con el psiquiatra Robert Waldinger.
La Princesa de Gales, muy popular en el Reino Unido, se recupera desde enero pasado de un cáncer cuya naturaleza nunca ha sido revelada.
Desde entonces ha ido retomando paulatinamente sus compromisos oficiales.
