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Las inundaciones en Texas dejan 59 años muertos y el trabajo de rescate continúa – El boletin Peruano

Texas Se enfrenta a una de las peores tragedias naturales de los últimos años debido a las fuertes lluvias registradas en el sur del estado. Causaron inundaciones graves que ya han dejado un equilibrio de al menos 59 personas asesinadas y docenas de desaparecieron. Los equipos de rescate trabajan incansablemente desde este domingo, en una carrera contra el tiempo para encontrar sobrevivientes, especialmente un grupo de 27 niñas desaparecidas que acamparon en la orilla del río Guadalupe.

Las tareas de búsqueda han movilizado tanto a las autoridades como a los ciudadanos, que se han unido para viajar en las áreas afectadas. Uno de los puntos más vencidos fue el campamento místico, ubicado en el condado de Kerr, donde en el momento del desbordamiento del río había alrededor de 750 niñas. Él Gobernador de TexasGreg Abbott, expresó su sorpresa después de visitar el lugar. «Nunca había visto una devastación similar causada por un desastre natural«, Dijo. A través de las redes sociales, explicó que el agua llegó a la cima de las cabañas y prometió continuar las operaciones para localizar a todos los menores.

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En el campamento, el daño es visible: mantas, juguetes y pertenencias cubiertas de lodo, además de las cabañas con ventanas destrozadas por la fuerza del agua. El propietario y director del recinto se encuentra entre las víctimas fatales, según lo confirmado por el Ayuntamiento de Kerrville.

Él Servicio Meteorológico Nacional (NWS) Advirtió sobre la posibilidad de nuevas lluvias en los próximos días. El riesgo es mayor en las áreas donde el suelo ya no puede absorber agua. Se estima que podrían caer entre 50 y 100 milímetros adicionales, con puntual acumulado de hasta 250 milímetros. El viernes, el río Guadalupe subió ocho metros en solo 45 minutos, después de un lluvia Noche de más de 300 milímetros.

El sur y el centro de Texas, conocido como el «callejón de inundaciones repentinas», complica el control de este tipo de desastres. Gerardo Martínez, un vecino de 61 años, describió la escena como dramática: «El agua se elevó a las copas de los árboles. Vimos casas y autos arrastrados por la corriente«