Luis Esteban Daza Lozano, un hombre de 35 años, se ha convertido en un fugitivo tras haber cometido el crimen de matar a un perro llamado Bianca en una carretera pública, en el centro histórico de Trujillo. Este triste suceso ha sido elevado a un tema legal, ya que el abogado del dueño de Bianca declaró que Daza Lozano también maltrató y acosó a su cliente, un aspecto muy preocupante del caso.
El día del incidente, el letrado relató que la mascota, Bianca, había ido tras la joven enfermera y fue agredida por el hombre, quien incluso causó un corte en la cabeza de la joven. Este acta se convierte en una prueba clave en el marco de esta situación violenta.
Leer también: El alcalde de Trujillo ha denunciado penalmente a un hombre por ser acusado de asesinar perros en las vías públicas.
Según el abogado, la pareja formada por Daza Lozano y la enfermera estaba en una relación que ya había empezado a deteriorarse, siendo la joven víctima de episodios de violencia tanto física como psicológica que la llevaron a poner fin a la relación hace aproximadamente dos meses. Este tipo de situaciones son más comunes de lo que se piensa y suelen ser muy difíciles de manejar.
En la trágica fecha del 8 de mayo, tras agredir a la joven enfermera, Daza Lozano se encontraba huyendo de la escena cuando Bianca, al conocerlo, cruzó su camino y movió la cola como signo de afecto, lo que resultó en la muerte del animal tras el ataque.
El abogado destacó que el agresor ya había sido denunciado previamente por actos de violencia física y psicológica, además de maltrato animal. Esto resalta una serie de conductas agresivas que parecen formar un patrón en el comportamiento de Daza Lozano.
El jurista mencionó durante una entrevista con RPP que «el Ministerio Público ya está al tanto del caso. La señora fue agredida físicamente antes del asesinato de su mascota, y aunque ya no son pareja, él ha vuelto a amenazarla». Este contexto de violencia se agrava con el hecho de que la víctima vive con un miedo constante tras haber sufrido agresiones físicas que incluyeron un corte en la cabeza, rasguños y moretones.
El letrado expresó su deseo de que el Ministerio Público tome en cuenta la solicitud para la detención preventiva del acusado, considerando que los delitos son acumulativos: la violencia contra su expareja y el crimen contra el animal. “Pedimos al menos cinco años de prisión”, mencionó el abogado, subrayando la gravedad de los actos cometidos.
Cabe destacar que según la Ley 30407 de protección animal y bienestar, el maltrato hacia un animal doméstico puede sancionarse con penas de privación de libertad de hasta tres años. Sin embargo, si un animal muere a causa de estos actos, la penalización puede extenderse hasta cinco años, lo que podría ser el caso de este desafortunado incidente.
